Marisela esta muy nerviosa su corazón le dice que algo malo esta pasando, al igual que Salvador que no ha podido dormir en todo el día.
Pasadas unas horas...
Bárbara esta mejor que Santos, aun no ha despertado pero los medicos esperan a que pronto lo haga, afortunadamente para ella son quemaduras muy leves comparadas con las del resto, gracias a Dios su rostro quedo protegido y el fuego no puso contacto profundamente.
Sin embargo Santos tiene más quemaduras no son muy severas, lo más preocupante fue la parada cardíaca, esos minutos que estuve su corazón sin latir, los doctores temen que no despierte o que si lo hace alguna parte de su cuerpo no reaccione.
A la mañana siguiente...
Marisela decide dar una vuelta por el pueblo, mucha gente cuchichea, ella quiere enterarse y al ver a Josefa y Federica con un períodico en la mano se los arrebata. Al ver la noticia del acidente tiene un mal presagio y sale corriendo a la casa de Cecilia con el períodico en la mano.
Bárbara empieza a gritar y los doctores llegan enseguida a atenderla.
-Doctor: señora tranquílicese.- le dice cogiendola de la mano tratando de tranquilizarla.
-Bárbara: el avión, Santos- dice sobresaltada con lagrimas en sus ojos.
-Doctor: tranquílizate si no la tendremos que sedar de nuevo- le dice haciendo que se calme aunque no lo consigue.
-Bárbara: ¿Quién sobrevivió?- dice esperando respuesta.
-Doctor: no hemos identificado quienes son, sobrevivieron 2 mujeres, 2 hombres y usted- le dice tratando de tranquilizarla otra vez.
-Bárbara: tengo que saber si Santos esta vivo- dice muy sobresaltada.
-Doctor: señora, usted no puede salir de aquí.
Al final el doctor tiene que ponerle un calmante por la crisis nerviosa. Marisela acaba de llegar a casa de Cecilia, esta muy sobresaltada.
-Marisela: tía lee esto- le dice entregandole el periódico.
Cecilia lo examina con exactitud.
-Cecilia:¿Conoces a alguien..?- dice desconcertada.
-Marisela: tía, Santos no volvió, tengo un mal presagio...- le dice nerviosa.
-Cecilia: ¿Piensas que él y Bárbara...?
-Marisela: si, tía, creo que se fueron juntos- dice con temor- tengo que ir a la capital.
-Cecilia: no creo que haya vuelos con lo sucedido, pero se algo que podemos hacer- le dice pensando en lo que Antonio le contaba.
Antonio le cuenta todo lo que Santos planeaba hacer esto le produce mucho dolor, pero se pone manos a la obra para averiguar, mañana mismo iría a ese pueblo.
A la mañana siguiente.
Los doctores estan cada vez más preocupados ya que Santos debería haber despertado ya que no tiene sedantes, temen los peor. Bárbara esta desesperada, no hace nada más que pedirle a los doctores salir del cuarto.
-Doctor: entiendanos señora no podemos hacer eso.
-Bárbara: quiero saber quienes estan vivos- le dice con desesperación.
-Doctor: ¿Cómo es el hombre?
Bárbara lo define indentificandolo a la perfeción.
-Doctor: tranquílicese.
-Santos: ¿Qué pasa, donde estoy?- dice sobresaltado.
-Doctor: estas en el hospital, hubo un gran accidente, ¿Cómo te llamas?
-Santos: no lo se- dice poniendose más nervioso aún.
Entonces nota cuando trata de mover las piernas que no puede, comienza a chillar.
-Santos: ¿Porque no puedo moverme?- dice muy nervioso.
-Doctor: acabas de despertar puede ser que tu cuerpo no este reaccionando- dice sin tratar de asustarlo más de lo que esta, pero se desespera más.
Le ponen calmantes ya que se empieza a alterar más porque no recuerda nada y tiene inmóvilizadas las piernas, ademas de unas quemadura, sus tejidos nerviosos no se conectan por lo cual esto quiere decir que no puede caminar.
-Bárbara: tengo que verlo por favor- le dice insistentemente.
-Doctor: hoy no se puede, ese paciente no esta bien y a usted le tenemos que hacer exámenes- le dice insistiendole mucho.
Pasada 1 semana.
Por fin han dejado a Bárbara ir a ver a Santos, entra lentamente hacia la habitación, se queda sorprendida al verlo en ese estado, tan pálido, se acerca hasta él, pero para su sorpresa el despierta.
-Bárbara: Santos mi amor, gracias a Dios que estas vivo- le dice acariciando su rostro con lagrimas en los ojos.
-Santos: ¿Quién es usted?- dice dejandola helada.
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